martes, 29 de enero de 2013

De tal palo tal astilla.


Foto: Si te gusta, puedes compartir.


Buenas tardes, en una de mis anteriores visitas a ACVEM (asociacion Comunidad Valenciana de esclerosis multiple)cogi el boletin que publican mensualmente.
Tengo que decir que me gusta leerlo ya que trata temas interesantes y de actualidad que tratan sobre la enfermedad, y en este ultimo descubrí un articulo que me encantó:

Siempre hay un primer momento para engancharse a correr.
Cada uno tiene su propia historia. Yo contaré la mia, aunque mi fuerte no sea escribir.
Hace muchos años (cuando todavia estudiaba) mi padre, un veterano de guerra en maratones era el que intentaba convencerme para salir a correr. Insistia mucho y yo no le entendía.
El correr era algo que me parecia aburrido y desagradable. ¿Sudar sin pasarmelo bien?. Eso no entraba en mi cabeza.
En mi favor he de decir que desde siempre él habia trabajado fuera, nos veía poco y cuando lograba convencerme aprovechaba esos momentos de entrene para "lavarme el cerebro" y preguntarme por mis estudios y por mi actitud en casa.....¿Como me iba a gustar correr?. Lo odiaba!!!.
Si, de vez en cuando salia a correr por aquella época, o mejor dicho, a sufrir. Mi padre, en la mayor parte, fue el culpable de mis primeros pasos. Llegué a hacer alguna carrera cortita con él e incluso intenté acabar alguna un poco mas larga como la de Siete Aguas pero digamos que no eran muy constantes mis entrenes. Antes me cogia.....antes me lo dejaba.
Se puede decir que empecé en verme envuelto en esto cuando en 2005 (1 año despues de casarme) me vi reflejado en un video con los amigos y decidí hacer algo con esos kilitos que me sobraban.
Los principios fueron duros: NUnca me gustó correr con música y siempre entrenaba solo. A veces me queria morir, pero poco a poco fui recorriendo la misma distancia en menos tiempo y eso me motivaba.
Cada vez alargaba mas mis entrenamientos y las carreras empezaron a formar parte de mi. Sin darme cuenta una carrera de 10 km. se me hacia corta y ¿por que no probar con medias maratones?. REcuerdo que por aquel entonces solo acabarlas era todo un reto. Hoy por hoy, al menos ya he conseguido acabar 3 maratones y una por debajo de las 3 horas. No es que sean muchas, pero les he perdido el miedo, que no el respeto. Ahora sé que puedo terminar todas las que me proponga.

     Lo que mas me apena de todo esto son las veces que le dije NO a mi padre. Cuando a mi me empezó a gustar lo de salir a correr él ya no podia acompañarme. Le habian diagnosticado Esclerosis Múltiple y dió un bajón increible fisica y animicamente. Ya no volvió a ser el mismo. Aunque su enfermedad se ha estabilizado bastante de unos 6 años hasta ahora, gracias a la medicina adecuada siempre sacó fuerzas para irse a nadar un buen rato a la playa y luchar contra corriente.
Este verano consiguió su 5ª travesia a nado al Puerto de Valencia, y aunque quedó ultimo eso nunca le importó porque jamás tiró la toalla. Tratamiento que salia a la luz, tratamiento que probaba.Siempre estuvo al dia con los avances de la investigación sobre su enfermedad y probó otras alternativas como la Apiterapia (uso terapeutico de productos de la abeja) o la Homeopatia.

  Quizás el correr maratones nos deje algo "tocados" fisicamente a los corredores populares pero a la vez te hacen un poquito mas fuerte mentalmente. Y eso a mi padre le funcionó. La profesión la llevó y la sigue llevando por dentro. Le preguntes cuando le preguntes del como se encuentra el siempre estará bien.

  Eso sí, a mi ahora se me parte el alma cuando mi hijo de 3 años me dice que quiere correr como su papi y venirse a las carreras conmigo. Y yo pienso: ojalá en unos años siga diciendo lo mismo.

 Raul Latorre


¿Os ha gustado?, para mi está lleno de sentimientos y cariño entre padre e hijo que te deja claramente un mensaje final.
Dos cosas he sacado en claro: lo primero y principal es que tenemos que aprovechar todo el tiempo posible para estar con los nuestros; Que el dia de mañana no nos tengamos que arrepentir de ese "algo" que no hicimos juntos o que no nos dió tiempo a hacer.
En segundo lugar comparto en que las situaciones extremas te hacen un poco mas fuerte, siempre y cuando el limite te lo pongas tú y conozcas hasta donde pudes llegar.
He corrido, corro y correré hasta que mi cuerpo aguante. Correré sabiendo siempre hasta donde puedo llegar, forzaré mas o menos según me encuentre y me sea beneficioso para combatir mi enfermedad, no para empeorarla.
Mi neurologa me dijo:
Haz ejercicio que es bueno, ¿corres?, evita el calor, sobresfuerzos y el limite te lo pones tú.
Pues eso haremos

                                                       MI MORALEJA

                      


1 comentario:

  1. Buenas querido amigo, me encantó esta entrada, como bien dices está cargada de sentimientos y de muchísima fuerza y energía positiva. Enhorabuena, hermosa lección de vida. El miedo como bien dice tu primera foto de portada es una muralla que nos ponemos nosotros mismos,y que siempre tenemos que intentar derribar, aunque sea poco a poco, gradualmente, para ir cumpliendo objetivos cada vez mas ambiciosos. Un fuerte abrazo Josete.

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